Nunca he
terminado de explicarme cómo es posible que con tantos números como ponemos, no
seamos capaces de acertar ni siquiera 4 alguna semana. Pero claro, el otro día
lo entendí. Estuvieron unos amigos en casa tomando una copilla y en un momento
dado, la conversación no sé por qué, derivó en que qué haríamos si nos tocara
la lotería.
Y de repente unos de los amigos (un matrimonio que está metido
en este ajo de la Peña) confesaron que ellos nunca habían pensado en esa
posibilidad.
¡Pero
bueno!, si es que así no llegamos a ningún lado. Si no remamos todos en la misma
dirección, no hay nada que hacer. Es fundamental ver los números antes del
sorteo, nombrarlos un par de veces cada uno, tratar de memorizarlos y empezar a
ensimismarse con ellos pensando en la cantidad de cosas que harías con el
dinero.
Así que
los que todavía no hayáis hecho nunca este ejercicio, ya estáis corriendo, que
el próximo sorteo sale esta noche. Éstos son los
números
La
verdad es que independientemente de la anécdota, pasamos una velada
agradabilísima en compañía de gente encantadora, decidimos que los premios
súpermillonarios pueden acabar siendo muy peligrosos si no se tiene la
suficiente cabeza (de ahí la idoneidad de las Peñas), y además he de decir que
el chiste que triunfó aquella noche fue el de “el demonyo dojo”. Os lo contaría,
pero hay que escenificarlo y por mail es muy muy complicado. Además en cualquier
caso nunca me saldría tan bien como a mi buen amigo
Rafa.
Os
dejo,
que me quedan oficialmente tres días de vacaciones. Voy a ver si aprovecho. Y ya
de paso echaré un rezo a ver si nos toca algo, porque si no la semana que viene
os voy a tener que dar un rejonazo de los que hacen perder la
amistad.
Hasta
entonces, que disfrutéis.
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