Soy lotero. No es una
profesión que haga que me acueste por las noches sintiéndome un héroe. Ni es una
profesión por la que la gente se vuelva loca, ni por la que los hijos se sientan
orgullosos de uno (espero que por otros motivos sí lo
estén).
Aún así, yo soy de las
personas que creo que hay que sacarle el juguillo a la vida, y prefiero buscar
el lado positivo de todo, incluso del trabajo. Por eso me embarco en proyectos
aparentemente chorras, como el de contar cuentos todas las semanas. Porque me
gusta y me divierte. Igual que me gusta hablar con la gente. Te
enriquece.
Ahora en La Presilla
nos hemos propuesto un nuevo reto. Os lo cuento. Sé que es abusar de vuestra
confianza, pero creo que merece la pena:
Hemos iniciado una
campaña de venta de Lotería de Navidad en favor de la organización CRIS contra el
cáncer.
Para ello, he hablado
con bastante gente involucrada en la organización. Y os quería
contar mi conversación telefónica con una de las personas, de la que no diré...
qué leche, si os voy a decir el nombre, porque estoy seguro de que a ella no
solo no le importará, sino que le gustará; Se llama Marosa y es
gallega.
Me dijo que sufre un
tipo extraño de leucemia para el que no hay cura (tranquilos, que no pretendo
contar penas). Solo hay tratamientos. Cuando se lo detectaron, le dijeron que su
esperanza de vida se reducía a meses. Pero durante esos meses, descubrieron un
nuevo tratamiento que le alargaba el horizonte unos dos o tres años. Durante
este periodo volvió a haber suerte, y le pronosticaron 6 ó 7 años más de
esperanza. Y así vive, salvando match-balls (como dice un amigo mío), "sin
ninguna intención de morirse" (como dice ella misma), esperando a que salga otro
adelanto que le regale otra bola extra.
Pero os cuento esto
por lo increíble de la conversación. Y es que me preguntó cuánto dinero podría
conseguir CRIS con la venta de Lotería. Y cuando le dije que 6.800€, se hizo un
silencio en el teléfono. Duraría un par de segundos, no hubo palabras pero se
percibía alegría, ilusión, esperanza... yo qué sé. Y de repente, ¿sabéis lo que
me dijo? Me dijo: "¿6.800€? ¿Tú sabes la cantidad de cosas que se pueden hacer
en la Unidad de Oncología Infantil con ese dinero?"
O sea, una tía a la
que le han puesto una cuenta atrás, que solo le puede salvar la vida una
investigación que está carente de recursos, y que además, alguna influencia digo
yo que tendrá ella para dedicar los presupuestos a unos proyectos o a otros,
coge y me dice que qué bien le va a venir a una Unidad que no es la
suya...
Si algún día lees
esto, ¡Olé tus cojones, Marosa! Nunca he conocido mayor muestra de
generosidad.
Os paso el enlace por si queréis comprar un décimo: http://criscancer.loteriaslapresilla.com/penas
Pero vamos, que esos
décimos son otra guerra. Que nuestra Peña sigue confiando en los numeritos de
Zoltar, aunque de momento, juguillo lo que se dice juguillo, no hemos conseguido
sacar ni para dar de beber a una pulga.
Estas son las
combinaciones que vamos a jugar durante todo el mes de
agosto
Un abrazo a todo el
mundo, y feliz verano.
LA
PRESILLA
Y yo jodido porque
se me cuela
la viejecilla en el
supermercado
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