Hace tiempo os conté que en verano estuve con los niños en un
picadero y que a la responsable del lugar le pedí una herradura. No sé si os
acordáis. Bueno, el caso es que la tuve por ahí un tiempo y acabó colgada en una
escarpia detrás de un cuadro aquí en La Presilla.
El otro día la volví a recuperar. No sé por qué, me llamó la
atención y pensé que ése no era sitio para tenerla guardada. Así que la cogí y
la colgué en el pasamanos de la escalera. El nuevo sitio tampoco
es que fuera de lo más apropiado, pero el hecho es que se quedó allí.
Me diréis que es una chorrada, o que me estoy volviendo un
supersticioso, pero el viernes pasado acertamos el Pleno de la Quíntuple Plus (otra
cosa es lo que cobramos, que fue una porquería).
En principio yo no había relacionado los dos hechos, pero anteayer
cuando subía la escalera, la vi allí y… que ya no está en la escalera tampoco.
Ahora le he colocado encima del terminal de la
lotería.
Vosotros seguiréis pensando que eso no sirve para nada, pero yo os
aseguro que sí: Al menos ha servido para escribir este
post.
Esta semana no hay popurri. Nos lo jugamos todo al Euromillones de
esta noche, que hay 100 millones de Bote. Lo tenemos crudo porque jugamos tres
combinaciones simples, de 5 numeritos. Pero eso sí, las estrellas las tenemos
garantizadas. Caigan las que caigan, las tendremos
acertadas.
Oye, yo no sé si es por la herradura, por la coyuntura o por el
buen tiempo, pero ¿no os habéis fijado que hay un montón de locales que llevaban
meses y meses cerrados, y que ahora los están reformando para abrir
próximamente? Chicos, esto está cambiando, ya lo
veréis.
LA PRESILLA
Hoy
puede ser el día menos pensado
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