La Primitiva Sem. 36

Comienza septiembre, que para muchos es como si empezara el año, y comienza como siempre con las pilas cargadas, retomando retos, con nuevas promesas, comprando el primer fascículo cada uno de su chorrada, con la intención de terminar (este año sí) la dichosa colección.

En mi caso, he venido vigoréxico perdido. He hecho mucho deporte este verano y parece que tengo la necesidad de no parar. De momento me he apuntado a una carrera de bicis en Talavera (la Talajara), quiero correr la Melonera y tengo en mente incluso participar en un triatlón (de esos sencillos sencillísimos).  ¿Alguien se apunta?

El tema es mantenerte un poquito activo. Y para eso es ideal engancharte a la temporada que comienza ahora con la Melonera y finaliza en mayo con el Maratón. Y entre medias, hay una carrera casi cada domingo (Madrid corre por Madrid, Canillejas o la San Silvestre, por nombrar algunas). Es divertido y no requiere ningún nivel extraordinario. Prueba de ello es que participo yo.

Os animo a todos (y a todas) a participar porque hay un dicho en el deporte que dice “cuanto más entreno, más suerte tengo”, así que ya estáis todos calzándoos las “zapas” para salir a trotar que necesitamos mucha suerte.

Entrenad, entrenad duro a ver si es verdad que sale alguna de estas combinaciones

Hoy os he hablado de carreras porque me parece un buen momento para empezar a hacer ejercicio los que no lo hagáis habitualmente y porque quiero dedicarle este post a una de nosotros, una peñista, que es una magnífica corredora a la que ahora le ha tocado correr una maratón. Ya sabes chavala, el principio siempre es duro, luego parece que te vas encontrando mejor hasta llegar a un momento de cansancio brutal. Pero cuando creas que ya no puedes más, verás la meta al final y cuando por fin superes la prueba, la satisfacción seguro que será indescriptible. ¡Vammooossss!

Esto me recuerda a una anécdota de mi mujer, que el año pasado corriendo precisamente La Melonera el calor le hizo parar en el kilómetro 9 y en ese momento un hombre que corría detrás le grito: “¡¡tú no te paras!! Vamos, a correr. 20 años me he tirado metido en el túnel de la droga y si algo me ha enseñado la vida, es que si quieres, puedes”.

…Al final, acabaron entrando en meta juntos, chocándose la mano.

Un abrazo.