Bajan las 
cifras del paro, Rajoy ha dicho que en 2.014 volvemos al crecimiento. Mientras 
tanto, la inflación vuelve a caer un poquito, se crean 1.000 puestos de trabajo 
no sé dónde. Ayer el Tesoro colocó más de 4.000 millones de euros en Bonos y 
Obligaciones y por si todo esto fuera poco… La Presilla reparte 3 eurazos por 
participación.
Chicos, el 
camino está siendo durillo pero al menos el tramo de curvas peligrosas parece 
que está terminando. Con una sonrisa y un poquito de fe, cualquier día nos cae 
una magnífica noticia del cielo y salimos de ésta.
Pero de 
momento, lo único que me ha caído a mí del cielo fue ayer un excremento en el 
parabrisas de no sé qué ave, aunque por la muestra, debía ser de brontosaurio. Y 
no sólo eso, es que encima el bicho se debía haber inflado a frambuesas porque 
el meteorito tenía un color rojizo que hizo meditar a mi hija de diez años 
durante unos minutos. Transcurrido ese tiempo, me dijo muy seria: “Papá, ¿los 
pájaros tienen la regla?”
En fin, que 
para el Bote de El Gordo de La Primitiva no, pero para este tipo de cosas parece 
que tengo un imán.
La 
participación que os presento, lo tengo que reconocer, no hay quién 
la entienda. 
Jugamos  con 14 números en El Gordo de La Primitiva y los mismos 
en La Primitiva del sábado. Bueno, los mismos no porque el 51 no cabía en La 
Primitiva y le he dado la vuelta; He puesto el 15. 
Las 
combinaciones salen a través de un programa informático que optimiza no sé cómo 
las combinaciones.
Lo que os 
decía al principio: Acto de fe.
Y un 
consejillo, el día que nos toque, si pretendéis seguir viviendo en Madrid, no os 
vayáis a comprar un descapotable (si me llega a caer eso en la cabeza, me 
descalabra). 
Que tengáis 
salud.
Víctor 
M. de Francisco
LA 
PRESILLA
Gracias 
por confiarnos su suerte.
