No
hay cojones.
¡Qué
frase!
Mira
que hay frases motivadoras eh... El "vammoossss" gritado con rabia, el "no hay
dolor" o un "te quiero" escuchado a la persona que amas, sin duda resulta
absolutamente estimulante. Pero si hay algo capaz de mover las montañas es la
frase de "no hay cojones" dicha por un amigo con una cerveza en la mano. Es que te dicen eso
y te vienes a arriba de tal manera, que eres capaz de cualquier cosa.
Y
ni los libros de autoayuda, ni las charlas de Emilio Duró consiguen ponerte las
pilas como lo consigue el mamonazo que te propone ese reto, ya imposible de
rechazar.
Yo
creo que no hay nada, absolutamente nada comparado con esa frase. Bueno, salvo
otra aún más excitante: La de "¿Que no hay cojones...? ¡Cómo que no hay
cojones!" Porque ésta, ya de entrada confirma que el que lo dice acepta el
desafío y además está animando (o comprometiendo) al que le ha
liao.
Y
en ésas estoy yo ahora; preparándome para lanzarme a nadar al lago de la Casa de
Campo el sábado que viene. Todo por unos amigos que soltaron la frasecita de
marras en el momento adecuado y claro, ya ni la ciclogénesis explosiva que dicen
que se acerca será capaz de parar esto.
El
problema es que la frase tiene otra acepción, que es la más adecuada a nuestra
Peña. Y es que no hay cojones de acertar más de dos números de una misma
combinación.
Uno
llega a desesperarse. Sobre todo cuando ve llegar por ejemplo a Alfonso cada
lunes (un habitual) diciendo "¿qué? La Peña nada ¿no? Pues yo en la mía he
acertado tres..." Y es que hay gente (la mayoría) de la que te alegras un montón
cuando pilla algo, por poco que sea, pero hay otros que joé, te da un coraje…
porque es que todas las puñeteras semanas trincan algo, y lo peor es que te lo
restriegan por la cara, como si dependiera de ti.
Pero
da igual, tenemos que seguir intentándolo, entre otras cosas porque tampoco hay
lo que hay que tener para llevarse el Bote de La Primitiva. Ni nosotros ni
nadie. Por eso ya asciende a 86 millones para esta noche. Aquí tenéis las
combinaciones que jugamos esta semana.
Están
sacadas directamente del terminal. Sin estudios, ni estadísticas, ni nada. Al
tuntún. Como el boleto que juega Alfonso. Eso sí, como esta semana tampoco
acertemos nada y él sí, le voy a empezar a buscar al aparato de Loterías un
detector de reconocimiento de voz, o un lector de iris o
algo.
Mucha
suerte.
Un
abrazo.
LA PRESILLA
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