viernes, 23 de febrero de 2018

Zaleuco de Locris

Como jugamos el martes y hoy os vuelvo a “atracar” con otros dos 2,50€ porque sigue vivo el Bote de 190 millones, al menos hoy os voy a traer una historia curiosa. La de Zaleuco de Locris.

No es nada conocido, al menos yo nunca había oído hablar de él, pero parece que fue el legislador que dio el primer código de leyes escrito de la civilización griega, allá por el s. VII a. C.

Una de estas leyes preveía sacar los dos ojos a la persona que cometiera adulterio. Y resulta que fue su hijo, y lo cometió.

Zaleuco podía haber mirado para otro lado, haber hecho la vista gorda o cualquier otra cosa que tuviera que ver con los ojos. Los propios habitantes del pueblo solicitaban el perdón para Zaleuco Jr. (la Historia no ha dejado registrado su nombre). Pero la honestidad del legislador, más la sospecha de que si le concedía el perdón a su hijo, ya no habría ninguna autoridad para hacer valer las leyes, le hicieron tomar una decisión controvertida:

Declaró que la ley contempla la extracción de dos ojos, pero nada dice de qué ojos han de ser, así que decidió arrancarle un ojo a su hijo y sacarse uno suyo, pues “siendo su padre, debí haberlo educado mejor para que no cometiera este tipo de actos”, dijo.

Y es que hay buenas prácticas que no entiendo por qué no han triunfado. ¿Os imagináis que este castigo hubiera llegado a nuestros días? Sería dificilísimo ver a una persona con los dos ojos[1].

Al que me dan ganas de arrancarle los ojos, es al niño que saca las bolas del bombo de Euromillones, porque madre mía, es que no acertamos nunca ni uno. Es increíble lo difícil que es.

Os dejo las combinaciones de esta noche, que en vista del éxito que está teniendo la Peña con este Bote, me he visto obligado a aumentarla un poquito


Un abrazo.

Buen fin de semana.





Víctor M. de Francisco
LA PRESILLA
Verdaderamente, parece
que nos ha mirado un tuerto




[1] Frase que se puede leer de dos maneras y ambas válidas: ver a una persona que tiene los dos ojos, o ver con dos ojos a una persona.

El perro y el hueso

Lo bueno que tiene lo de atender al público es que si te pones en modo receptivo, aprendes un montón. De nada en particular, de la vida simplemente. Pero bueno, no deja de ser curioso.

Hoy un hombre se ha llevado una participación de la Peña de esta noche. Hemos empezado a hablar y le he comentado que no acertamos nunca nada. Es más, le decía, no creas que es fácil no acertar nunca ni un número.

Y me ha contestado con una pregunta. Me ha dicho “¿sabes lo que le dice el perro al hueso? Tu eres duro, pero yo tengo tiempo…” En un primer momento me ha gustado, porque he querido entender que tarde o temprano seremos capaces de hacernos con él (con el premio, claro). Pero madurando la idea, me he acojonado un poco porque con la suerte que tengo yo, igual me hacen una inspección los del Museo de Ciencias Naturales porque llevamos tanto tiempo con el mismo hueso y es tan duro de roer que igual es porque es del Paleolítico Inferior y tiene valor científico.

En fin, que hoy se celebra el primero de los cinco sorteos que como máximo, habrá de 190 millones de Bote. Y por supuesto, volvemos a jugar.

Este es el hueso al que trataremos de hincarle el diente.



Un abrazo.


Víctor M. de Francisco
LA PRESILLA
Nos vendría bien la pasta
porque estamos caninos.

163 millones

A ver, vamos a aclarar términos, que yo creo que hasta que no estén todos los flecos bien cerrados no nos va a tocar: cuando digo “libres de impuestos”, no me refiero a que no vayamos a pagar impuestos, quiero decir que a los 163 millones (porque esta noche ya jugamos para 163), le aplicamos la retención de Hacienda del 20%, es decir que se queda en 130.400.000€, y eso lo repartiríamos entre los 144 que somos.

Por eso digo (ahora) más de 900.000€ libres de impuestos para cada uno, que para ser más correcto, debería decir una vez aplicada ya la retención.

Y ya que estamos con este tema, os tengo que decir que me repatean los anuncios en los que se presenta a bombo y platillo lo de “los días sin IVA”, “llévatelo y no pagues el IVA”, etc, etc.

No me refiero a cosas tan obvias como que se prohiban los cigarrillos de chocolate porque incitan a fumar, que también, porque estos anuncios incitan a evadir impuestos. Me refiero a que hay un órgano estatal que se dedica a vigilar la legalidad de los contenidos en la publicidad (se llama Autocontrol) y que no permite que un Minion se mueva en el spot porque da a entender que interactúa con el producto anunciado, y sin embargo permite que una tienda de cacharros electrónicos te diga que eres tonto si no los compras sin pagar el IVA.



Perdonad la chapa de hoy, aunque me sé de uno que va a saber por dónde voy. Un abrazo.

La Peña y la cuestión catalana.

¡Venga ya hombre! ¿Nos hemos vuelto locos?

Estamos todos del tema catalán como para que me ponga yo aquí también a hablar de eso. Quita quita…

Yo sigo con lo mío.

Y ya que estoy, os voy a explicar cómo funciona esto porque no es nada frecuente que suceda y la norma no es muy conocida:

Cuando no hay acertantes de 5 números y 2 estrellas el premio se va acumulando de tal manera que el Bote sigue aumentando. Pero por lo visto, no sé qué normativa no permite que supere los 200 millones. Entonces si el Bote llegara a 190, que estamos cerca, se mantendría el mismo importe durante 5 sorteos (salvo que alguien se lo lleve, claro). Y en el siguiente sorteo, se repartiría sí o sí.
Si no hay acertantes de 5+2, se repartiría en la siguiente categoría (5+1).

Pero vamos, es tontería. Porque los cinco números y las dos estrellas que van a salir esta noche están contenidos en alguna de las combinaciones que os presento y que son las mismas que jugamos en los últimos cuatro sorteos


Otra cosa importante. Como vuestro “compromiso” es invertir 2,50€ a la semana en esto y estamos duplicando, el que quiera renunciar a la participación de hoy que me lo diga.

Pero vamos, si queréis buscar alguna similitud entre la Peña y la cuestión catalana, sin duda la hay: que todos queremos pasta.



Víctor M. de Francisco
LA PRESILLA
Bona sort.

130 millones

Piénsalo. 130 millones. Es verdad que Hacienda te da un mordisco. Pero bueno, piensa en 104 millones.

Problemas.

Que si le doy uno a cada hermano. “Qué rata, solo uno” será todo lo que oirás. Que si con Fulanito hay que tener un buen detalle que se portó muy bien cuando... Ya estará ahí tu cónyuge para decirte que de ninguna manera. Y si lo propone tu cónyuge, ya serás tú quien diga que no.

Problemas en casa.

Pero una vez que “repartes” lo que consideras, te siguen quedando ¿cuánto? ¿95 millones? ¿100?

Con 100 millones tienes que cambiar de amigos, claro. Porque tu gente ya no puede mantener tu nivel de vida. Y si siempre pagas tú, se sienten ofendidos. Pero si no pagas por no ofenderles, te tachan de ruin. Nada, hay que cambiar de amigos.

Y de casa, claro. Te compras la acojocasa, con vecindario de la Jet Set (ese término ya no se usa ¿no?).

El caso es que tampoco terminas de estar del todo a gusto con este tipo de gente porque a ti, que te pongan un Negroni de Campari a las dos de la tarde para tomar el aperitivo, no te convence. Tú eres más de bravas y tercio de Mahou.

Por no hablar de los gastos de la casa. Que sí, que tienes mucha pasta. Pero aún así no te han educado para tirar el dinero y ese gasto de luz en jacuzzi te duele aunque tengas de sobra para pagarlo.

¿Y el trabajo? Dejas de trabajar, dejas de charlar con los compañeros a la hora del café. Dejas de comerte marrones que en el momento duelen, pero que luego hacen que sientas que las vacaciones te las tienes más que merecidas.

Dejas de tener vacaciones. Porque que tu vida sean unas vacaciones permanentes, créeme, no mola tanto.

Y te vas a jugar al golf. Los martes, al golf. Ese deporte asimétrico al que llegas tarde, porque tus vecinos llevan años practicándolo, y claro, como tú quieres ir a su mismo ritmo, te empiezan a aparecer dolores en grupos musculares que no sabías ni que existían.

En definitiva, que los 130 millones para una sola persona, aparte de ser inmoral, pueden llegar a ser hasta una putada.

Pero ahora cambia el escenario.

Te caen 720.000€ libres ya de impuestos (que lo he calculado). No tienes que repartir con nadie porque es un premiazo, pero no como para ir dando dinero a nadie. Además, el que hubiese querido, que hubiera participado.

Reduces un poquito la cuota de la hipoteca para vivir con más tranquilidad. O directamente te la quitas. Y partir de mañana, sigues viviendo igual que vivías, pero sin mirar en ningún momento la cuenta a ver si hay saldo o esta la cosa chunga. Y dándote esos pequeños caprichillos a los que antes renunciabas.

Y lo más importante: tus amigos también deberían estar incluidos en la Peña, con lo cual el nivel de todos sube por igual. Que un fin de semana queréis alquilar un catamarán por el Adriático... Pues ¡quién dijo miedo! Todos al Adriático.

¿Y de qué depende todo? Pues de que las bolitas coincidan con esto...


Muy importante: animad a vuestros amigos a que participen en la Peña de La Presilla, si no lo hacen aún. Que ellos estén forma parte de vuestra futura felicidad.



Víctor M. de Francisco
LA PRESILLA
Hoy puede ser el
día menos pensado.






Sem. 36 Venancio

La profesora estaba siempre gritando:

- ¡Me vas a volver loca, Venancio! ¡Contigo ya no puedo más! ¡Venancio, eres un inútil!

Un día, la madre de Venancio fue a la escuela preocupada por el pésimo rendimiento de su hijo. La profesora le dijo que su hijo era un desastre, que tenía las peores notas del colegio y que ella, en 25 años de Enseñanza, nunca había visto un niño tan torpe.

La madre quedó tan asustada con esta sincera conversación, que decidió replantearse su vida (y la de su hijo) y se mudaron a Alemania para que Venancio estudiara en un centro especializado.

Veinticinco años después, a esta misma profesora le fue diagnosticada una grave enfermedad del corazón. Todos los médicos consultados coincidieron en que ella necesitaba una cirugía muy delicada y muy costosa que solo un famoso médico español que vivía en Alemania podía hacer. La profesora, ya sin esperanzas, decidió vender todo lo que tenía y con los ahorros de toda su vida, emprendió el viaje a Berlín para agotar la última oportunidad.

La intervención fue realizada por el genial médico que declaró que la operación fue un éxito absoluto.

Cuando ella abrió los ojos, sintió que toda la fuerza volvía a su cuerpo. Y vio parado a su lado a un bello y joven médico que le sonreía. Ella quiso decir unas palabras de agradecimiento, pero no pudo hablar... De repente, su rostro se puso azul, intentó levantar la mano y hasta quiso gritar pero no pudo hacerlo. No hubo tiempo para ningún tipo de reanimación. Murió ante el médico que intentaba entender qué es lo que había pasado.

Entonces, fue cuando el médico miró a su lado y vio a Venancio, que trabajaba en el Departamento de Mantenimiento del hospital. Él fue el que desenchufó el respirador artificial para poder enchufar la aspiradora.

¿Qué creías? ¿Qué Venancio se había convertido en un eminente cirujano cardiovascular…? Tú has visto demasiadas películas...

¡EL QUE ES TONTO, ES TONTO PA’TOA LA VIDA!

La historia que os traigo hoy no es mía, me la enviaron por WhatsApp el otro día. Pero la moraleja del cuento es real: LA GENTE NO CAMBIA

Os digo esto porque yo tonto no me considero, pero igual un poco cenizorro… Vamos, que si antes de que empiece la nueva temporada de la Peña decidís que mejor lo dejáis, lo entendería perfectamente.

Pero si os quedáis, prometo intentar cambiar. Voy a pasar de cenizorro a suertudo, ya veréis como nos va a ir mucho mejor. ¿Y por qué no empezar con el Gordo de la Primitiva de este domingo? Ahí os la dejo




Víctor M. de Francisco
      LA PRESILLA
No nos toca ni por enchufe.

jueves, 31 de agosto de 2017

Generosidad. CRIS

Soy lotero. No es una profesión que haga que me acueste por las noches sintiéndome un héroe. Ni es una profesión por la que la gente se vuelva loca, ni por la que los hijos se sientan orgullosos de uno (espero que por otros motivos sí lo estén).

Aún así, yo soy de las personas que creo que hay que sacarle el juguillo a la vida, y prefiero buscar el lado positivo de todo, incluso del trabajo. Por eso me embarco en proyectos aparentemente chorras, como el de contar cuentos todas las semanas. Porque me gusta y me divierte. Igual que me gusta hablar con la gente. Te enriquece.

Ahora en La Presilla nos hemos propuesto un nuevo reto. Os lo cuento. Sé que es abusar de vuestra confianza, pero creo que merece la pena:

Hemos iniciado una campaña de venta de Lotería de Navidad en favor de la organización CRIS contra el cáncer.

Para ello, he hablado con bastante gente involucrada en la organización. Y os quería contar mi conversación telefónica con una de las personas, de la que no diré... qué leche, si os voy a decir el nombre, porque estoy seguro de que a ella no solo no le importará, sino que le gustará; Se llama Marosa y es gallega.

Me dijo que sufre un tipo extraño de leucemia para el que no hay cura (tranquilos, que no pretendo contar penas). Solo hay tratamientos. Cuando se lo detectaron, le dijeron que su esperanza de vida se reducía a meses. Pero durante esos meses, descubrieron un nuevo tratamiento que le alargaba el horizonte unos dos o tres años. Durante este periodo volvió a haber suerte, y le pronosticaron 6 ó 7 años más de esperanza. Y así vive, salvando match-balls (como dice un amigo mío), "sin ninguna intención de morirse" (como dice ella misma), esperando a que salga otro adelanto que le regale otra bola extra.

Pero os cuento esto por lo increíble de la conversación. Y es que me preguntó cuánto dinero podría conseguir CRIS con la venta de Lotería. Y cuando le dije que 6.800€, se hizo un silencio en el teléfono. Duraría un par de segundos, no hubo palabras pero se percibía alegría, ilusión, esperanza... yo qué sé. Y de repente, ¿sabéis lo que me dijo? Me dijo: "¿6.800€? ¿Tú sabes la cantidad de cosas que se pueden hacer en la Unidad de Oncología Infantil con ese dinero?"

O sea, una tía a la que le han puesto una cuenta atrás, que solo le puede salvar la vida una investigación que está carente de recursos, y que además, alguna influencia digo yo que tendrá ella para dedicar los presupuestos a unos proyectos o a otros, coge y me dice que qué bien le va a venir a una Unidad que no es la suya...

Si algún día lees esto, ¡Olé tus cojones, Marosa! Nunca he conocido mayor muestra de generosidad.

Os paso el enlace por si queréis comprar un décimo: http://criscancer.loteriaslapresilla.com/penas 

Pero vamos, que esos décimos son otra guerra. Que nuestra Peña sigue confiando en los numeritos de Zoltar, aunque de momento, juguillo lo que se dice juguillo, no hemos conseguido sacar ni para dar de beber a una pulga.

Estas son las combinaciones que vamos a jugar durante todo el mes de agosto


Un abrazo a todo el mundo, y feliz verano.




Víctor M. de Francisco
LA PRESILLA
Y yo jodido porque se me cuela
la viejecilla en el supermercado